lunes, 5 de enero de 2015

Padre moderno- Capitulo 5



Padre moderno- Capitulo 5

Los chicos fueron castigados,  más que por una  pelea, por casi quemar la casa y llevarse el televisor entre las patas, de que les quedo calientito el trasero claro que les quedo y no se movieron cómodamente ese domingo, lo peor de todo es que el lunes tenían clase y estar sentado todo el día seria incómodo.
Lunes
Los chicos tuvieron su  día normal, se fueron a la escuela, jugaron  y en entre las  actividades diarias con los amigos  se les olvido que el trasero les  dolía, admitiendo que a fin de cuentas su padre no les había dado tan recio ya que en la mañana ni se les notaban las marcas de los cintos, les dolía  pero podrían soportarlo.  Eso si, quedaron sin televisor y esa semana tenían tareas extras por su desastre…
Antonio por fin le había dado la oportunidad de regresar solo a casa pero tenía que hacerlo con cuidado y estar a la hora marcada.
Los tres chicos estaba en casa haciendo deberes…
Luis: eeey espérate yo que recuerdo te gane una apuesta… si la recuerdas.
Ricardo: olvídala.
Luis: no te pases, si la apuesta la hubiese perdido yo, esa si no se olvida.
Ricardo: yo no voy hacer tus deberes has los tú, que por tu culpa me colorearon  el trasero.
Luis: voy hacer los extras pero los demás tú los haces… y aquí se terminó la conversación…
Los chicos no dejaron la cantaleta todo el día ni a la hora de la comida se quedaron calladitos…
Francisco: pues que se traen ustedes que no dejan de alegar…
Luis: Ricardo y yo hicimos una apuesta y este pelafustán no la quiere cumplir.
Francisco: por ese motivo no me gusta que estén apostando, siempre termina uno llorando…
Luis: no estoy llorando pa, pero una apuesta es una apuesta, que no?
Francisco: Ricardo  cumple o déjense de juegos…
Ricardo: pero paa.
Francisco: de que fue la apuesta?
Ricardo: hacer los deberes del otro.
Francisco: Ricardo  cumple la apuesta o déjense de tonterías.
Luis: wwuuuju… genial
Francisco: tu no celebres todavía estas castigado, sigues teniendo los deberes extras… y dejen las apuestas por favor…
Anabel: padre mío te mordiste la lengua…
Ricardo: uuuy
Francisco: yy eso porque? No, no me mordí nada muchachita.
Anabel: ¡dejen las apuestas! tú también haces apuestas eso y los retos…
Francisco: nunca he apostado dinero.
Anabel: pero si cosas.
Francisco: cosas?
Anabel: hace un año le hiciste una apuesta a mí tío Julián el que perdiera le decía a los abuelos que ninguno podría asistir a la ceremonia de mi tía  Maira.
Francisco: aa si.
Luis: las apuestas que hacemos en los partidos de futbol también cuentan.
Anabel: papá que ejemplo es el que les das a los chicos…
Francisco: yo se que no es muy buen ejemplo.. no quiero que sean apostadores, pero que sepan cumplir con su palabra, en una apuesta y en un reto eso es lo que hay que saber cumplir.
Luis: a menos de que te vayas a las vegas a las apuestas o apuestas callejeras hay pagas porque pagas…
Francisco: eso ya queda en un término alegado del punto principal…
Anabel: a fin de cuentas es lo mismo…
Francisco: es lo mismo pero no es igual… hija contigo siempre termino regañado.
Luis, Ricardo y Antinio: jejejejjeje
Francisco: muy bien lo dejamos asi.
.
Los chicos siguieron sus actividades del dia.
Ricardo: pa puedo salir?
Francisco: a donde?
Ricardo: con unos amigo, vamos el centro comercial..
Francisco: esta bien… pero ten tu teléfono a la mano…
Ricardo: si…
Dejando una tarde tranquila para todos
 …
Era martes por la tarde, Francisco había salido a correr para distraerse un rato, invito a sus hijos pero ninguno acepto.  Ya de regreso tuve un pequeño percance y es que cuando bajaba una escalera un  joven en patineta, por hacer una súper maniobra (según él) se estampo con Francisco, para mala suerte de este, cayo con el brazo izquierdo haciéndose una fractura, mientras que el muchacho casi se rompe la perna  en dos, una pareja que estaba en el parque llamo a ambulancia y a los dos se los llevaron.
Los padres de aquel chico casi le cocinan el trasero por causar un accidente. Francisco tuvo que llamar a Anabel para que lo recogiera, no le dijo nada solo que necesitaba que fuera a recogerlo frente al hospital…
-papá que te paso? porque no me dijiste que estabas lesionado?
- porque ya me imaginaba el drama que ibas hacer, además no quería preocuparlos, estoy bien, de acuerdo.
- y que te paso?
Francisco conto todo lo que había pasado… un accidente por descuido de un muchachito despistado que no sabe para qué son las escaleras y los pasamanos.
Anabel se dedicó a conducir en lo que su padre le contaba lo que había pasado… cuando llegaron a casa las preguntas no faltaron.
Ricardo: quien te golpeo?
Antonio: papi que te paso : (
Antonio corrió a darle un abraso a su papá y Francisco con el brazo bueno cargo a su hijo.
Francisco: una patineta me atropello.
Luis: menos mal que fue una patineta que si no, te deja peor.
Antonio: patineta estúpida… para que esta lastimando a mi papá.
Francisco: ee sin palabrotas… pero gracias por defenderme –le dio un beso en la mejilla-
Anabel: vamos Anton… deja que papá descanse –cargo a su hermano y lo dejo en el piso-
La semana estuvo algo complicada para Francisco pero  supo llevar las cosas o por lo menos no complicarse tanto la vida. En el trabajo le dijeron que tomara unos días pero él se negó, tenía una mano perfecta y con ella podía realizar sus actividades.
En la semana fue a visitarlo su hermano  Julián con sus pequeños niños Cesar de 7 y  Sam de 5, que no estaba enterado del pequeño accidente de su hermano.
Julián: hay hermano  que  te paso…
Francisco: pues ya vez… pero pasa… que te trae por aquí?
Cesar – Samuel: hola tío.
Francisco: hola mis pequeños como estas.
Cesar: bien,  pero tú no tanto. –arrugo la carito al ver a su tío-
Francisco: yo estoy muy bien… vayan  a jugar con su primo está en su cuarto.
Los dos niños salieron corriendo al cuarto de Antonio en los que los hermanos hablaban…
- mala suerte con tu caso y ya lo sabe mama.
- no y no pienso decirle,  así  que callado.
- muy bien, no le diré nada.
En lo que los dos hermanos estaban conversando los pequeños niños de la casa están jugando en la planta alta estaban ellos solos y  se pusieron a jugar con el balón de Ricardo, Antonio era el mas grande ya que los otros dos niños eran pequeños por lo que el juego era complicado asi que solo se pusieron a botar la pelota de un lado a otro entres ellos.
Cesar: yo  puedo hacer que bote mas alto.
Sam: yo también, yo también, mira, mira –le quito la pelota a su hermano y la hiso rebotar pero solo fue un metro lo mas que pudo alcanzar de alto-
Antonio: es que estas chiquito
Sam: mmm
Antonio: yo tampoco puedo aventarla tan alto como Ricardo.
Sam: y si le digo que me enseñe lo haría.
Cesar: no porque es mayor y está ocupado.
Antonio: nunca hace nada útil, no creo que diga que no, pregúntale cuando llegue.
Sam: sí.
Los  niños se pusieron a jugar por toda la casa haciendo travesuras en cada tanto. Después de una hora de juego se enfadaron y fueron con sus padres.
Antonio: papi nos compras un helado.
Francisco: en cuanto llegue uno de tus hermanos que ellos los acompañen… que les parece si les doy unos dulces mientras esperan.
Cesar, Sam, Anton: siiii
Los niños fueron detrás de Francisco, el cual sacó una bolsa de dulces y le dio unos cuantos a cada niño.
….
Luis: hola tío como estas –entro haciendo relajo-
Julián: muy bien –saludo a su sobrino chocando los puños- dónde estás?
Luis: salí con mi novia.
Julián: y tus hermanos?
Luis: Ricardo supongo que entrenado o jugando con sus amigos y An esta con unos amigos terminado un trabajo para la escuela.
Julián: cada vez que vengo o habla nunca están en casa, si no estás jugando fuera, están en otras cosas.  No les deberías poner un límite con las salidas? –le dijo a su hermano-
Luis: tío ya no me vas a caer bien ee.
Francisco: eey tu no reclames… mmm pues no me parece mal que ellos estén fuera de la casa siempre y cuando cumplan con sus cosas y yo este enterado de donde están. 
Julia: hermano les das muchas libertades… y eso lo saben todos (sus padre y hermanos de Fran..) no crees que se te salgan de control…
Francisco: son buenos chicos y no voy a dejar que se salgan de control, no les conviene… además tienen una buena educación no es que los dejo hacer lo que les venga en gana.
Luis: si, es malo, no me deja tomar y a Ricardo sí.
Julián: pues tu hermano tampoco debería de tomar es menor de edad.
Francisco: he dejado tomar a tu hermano en pocas ocasiones y eso fue apenas hace dos meses y estando yo o en alguna que otra fiesta que me pide permiso.
Julián: mi madre te mataría si lo supiera… pero bueno…
Francisco: no es que lo deje acabarse todo o llegar ebrio a la casa,   prefiero que tome si lo estoy checando o me diga si lo hiso  y no a escondidas como un mocoso lo hacía a los 16.
Julián: ya entendí no hay quien te gane.
Luis: uuuuu ya te desenmascararon jejejeje… y mi abuelita te dio tus buenas…
Francisco: Luis sabes cómo hablarle a tu tío, verdad.
Luis: bueno… tío a usted le pegaron por eso? 
Julia: igual me hiciste la misma pregunta.
Luis: me dijeron que cambiara la forma de hablar no la pregunta.
Julian: mmm no a mi nunca…
Francisco: no seas mentiroso que te descubrieron y mi padre te metió una buena que estuviste llorando todo la noche…
Luis: jajajaja
Julián se puso verde de coraje de que su hermano sacara los trapitos al sol.
Julián: usted no se burle de su tío muchachito este –lo atrapo y tumbo en el piso  donde le soltó una tanta de nalgadas-
Luis: aaii ya, ya…
En eso bajaron los pequeños que vieron a Luis pidiendo ayuda pero en vez de ayudarlo los tres se subieron arriba de él haciendo cosquillas.
Luis: ya, ya déjenme… papá ayúdame jeje ya niños jajaja.
Francisco: eso te pasa por burlarte de tu tío. –le dijo con una sonrisa disfrutando de lo que pasaba-
Luis: jejej no, no niños ya…o no les presto mis juegos..
Los pequeños dejaron a Luis ya que les justaba mucho los videojuego.
Luis se paro: que malos son conmigo yo ni les hago nada malo
Francisco: ya no llores que tú te lo búscate… lleva a los niños a comprar un helado.
Luis: también para mí.
Francisco: si,  trae para todos. –le dio dinero-
Luis: no para ustedes no por malas personas… vámonos… corran, corran…-se llevo a los niños-
Las horas pasaron, llego An y al poco rato Ricardo que saludo y  se fue a dar un baño porque estaba todo sudado, pero  a los 5 minutos bajo con una cara de pocos amigo.
Francisco: que paso?
Ricardo: mi cuarto esta patas arriba y mi cama esta mojada.
Sam: solo poquito.
Ricardo: ustedes fueron?
Sam: fue sin querer… me perdonas?
Julián: eee ustedes que hacían en el cuarto de su primo, les dijeron que fueran al cuarto de Antonio no al de los mayores y saben que no se entra a los cuartos con agua. –les soltó a cada niño cinco nalgadas haciendo un mar de lágrimas, mas por Sam que era el más pequeño-
Cesar:   Pass, pass, pass, pass, pass –auu aii perdon buua-
Sam:     Pass, pass, pass, pass, pass – buua, buuuuaa, buaaa…
Ricardo solo hizo una mueca no quería que les pegaran a los pequeños, solo quería una explicación por su cuarto. (en su casa todo podía pasar) 
Anabel: ya pequeños podemos limpia para que ya nadie se enoje vamos… -cargo a Sam que estaba llorando-.
Francisco: ya no te enojes son niños y en un rato se limpia todo.
Julián: ya sé que son niños pero ya saben que se tiene que portan bien.
Los chicos fueron a recoger el cuarto para que su tío ya no los regañara, que no fue lo único que tuvieron que limpiar, en los demás cuartos también había cosas por los pisos pero no dijeron nada solo limpiaron antes de que  subieran por ellos para irse.  Anabel seco la cama con la ayuda de la plancha y su secadora,  no le tomo mucho tiempo y limpio lo demás.
Una vez terminaron los pequeños terminaron de limpiar con la ayuda de los mayores y  fueron con su padre que ya los esperaba para irse a casa…
La semana había pasado sin mayor dificultad…
Francisco estaba en su oficina,  Anabel había salido con Antonio y Ricardo había salido a jugar.
Francisco había tenido unos pequeños problema con su proyecto de negocio lo que lo tenía  algo molesto y algo frustrado pero se estaba poniendo en marcha para solucionas los detalles, su brazo ya estaba mejor pero no estaba completamente recuperado ya que se suponía que tenía que estar en reposo y nunca lo estuvo entre  sus actividades,  trabajos, horas de ejercicio y sus hijos lo mantenían muy ocupado y no se podía quedar quieto, no podía dejar de trabajar por una tontería según el…
Luis: pa, papa, pa –le toco el hombro porque no le hacía caso-
Francisco: que paso.
Luis: perdón por interrumpirte, pero tienes una llamada…
Francisco tomo el teléfono: bueno…. quien habla??? ¡-----!
Francisco: mamá espera, déjame hablar primero…
---- Conversación telefónico----
Francisco: bueno…
Diana (madre y abuela): me quieres decir porque no me dijiste que tuviste un accidente?
Francisco: quien habla??? ¡-----!
Diana: tu madre te está hablando, porque veo que tú no tienes la decencia de llamarme, tan ocupado es que….
Francisco: mama espera, déjame hablar primero…
Diana: que te dejo hablar ni que ocho cuarto, porque carajos no me dijiste del accidente.
Francisco: madre, no fue nada serio, fue una simple fractura que ya está mejorando…
Diana: y una fractura se te hace poco, muchacho inconsciente.
Francisco: mama no soy un niño, ni un adolecente.
Diana: créeme que lo estoy dudando… porque me entere que ni siquiera has estado en reposo a pesar de que el doctor te lo mando…
Francisco: quien te dijo eso?
Diana: quien me haya dicho…
Francisco: fue Julián?
Diana: no tengo porque decirte quien fue, no me estés interrogando que soy tu madre, no uno de tus hijos…
Francisco solo apretó los dientes, él amaba a su madre pero la señora tenía su carácter, mas cuando sus hijos, nieto o marido le ocultaban las cosas o cuando dejaban pasar tiempo sin llamarle y ambas cosas había hecho…
Francisco: mama estoy bien…
Diana: y  porque no me has llamado?
Francisco: mama, se está cortando la llamada… casi no le escucho.
Diana: hijo de tu madre podre ti si me cuelgas.
Francisco: ya casi no la escucho, ma te quiero, luego le llamo… -y colgó el teléfono-
Luis se quedó con cara de auuu…
Francisco: carajo…
Luis: la abuelita te mata… -se salió porque vio que su padre no estaba para comentario de nadie-…
Francisco solo movió la cabeza cuando vio a su hijo escaparse de la escena del crimen, se sentó en la silla  y se meció en ella un rato hasta tranquilizarse y continuar con su trabajo, lo mas seguro es que cuando visitara a su madre lo mataría por lo que hiso, pero eso sería después hoy tenía mucho trabajo que hacer y no podía preocuparse en otras cosas.

….

1 comentario:

  1. Me gusto mucho tu capi Mary....
    jajaja pero que Francisco que ejemplos les esta dando a sus hijos...
    espero que su Mmá se lo suene jejeje

    ResponderBorrar