sábado, 26 de septiembre de 2015

CAPITULO 2 VIENDO LAS COSAS TAL CUAL SON



CAPITULO 2
VIENDO LAS COSAS TAL CUAL SON

Peter se sintió fatal cuando vio por el espejo retrovisor a Neal llorar en el asiento trasero del auto, ahora era él quien no tenía palabras para el muchacho supo que había sido muy duro, las palabras las había dicho en un momento de caliente enojo y no midió la intensidad del mensaje.

 Felicidades! Y así piensas que el chico se reformara? Ese es tu aporte para la vida dura que ha tenido que pasar este muchacho'

Peter se recriminaba interiormente, él más que nadie se sabía de memoria el expediente de Neal Caffrey; la niñez dura que paso, un padre ausente, ir de un lado a otro en protección de testigos, convertirse en un ladrón de renombre con tan solo 15 años, ser atrapado y casi enviado a la cárcel que de no haber sido por la insistencia de Elizabeth ése muchacho estaría en prisión y no bajo su cuidado, ambos acogieron a Neal. Y apenas eran 4 meses de eso.

El chico vivía con la pareja y todo parecía superficialmente bien, al menos eso parecía hasta hoy, Peter no pudo más que sentirse inútil ya que todo lo que parecía bueno era una falsedad el chico no estaba por buen camino como él creía que estaría al vivir con ellos.

 Que está mal? Porque Neal ha vuelto a falsificar? porque lo hizo?....tonto! debiste preguntárselo antes de decirle que era un criminal!...porque lo hizo?

El agente Burke trataba de encontrar respuestas a sus interrogantes haciendo una retrospectiva hasta el día de hoy; recordó lo feliz que se había puesto El al lograr convencerlo para que Neal viva con ellos, desde el primer día fue ella quien abrió los brazos para que se sintiera cómodo, era Elizabeth la que siempre hablaba con él, la que siempre congeniaba en sus gustos, la que guardaba confidencias, la que lograba que le hiciera caso sin levantar la voz, la que lo consentía, la que no dudaba en celebrar sus logros.

Él en cambio no era muy afectuoso con el joven falsificador, es más, no recordó haberle abrazado ni si quiera cuando entro por primera vez entro a su hogar ni cuando paso los exámenes a los que postulo en la mejor escuela del país y obtuvo una beca, solo le había dado un apretón de manos tal cual te felicita un extraño, una expresión de conformidad seca.

Peter recordó ése día en específico, a su mente vino la imagen de Neal agrandando sus ojos y bajar la cabeza después del intercambio de manos y se puso a pensar más…eso era algo que el chico hacía a menudo, otra vez, más imágenes empezaron a cruzarse en su mente…Neal siempre queriendo agradarle, siempre esperaba complacerle, siempre esperando más de su guardián, tal como le había dicho su esposa.

Como podía decirle: solo eres un criminal si ni se tomaba la molestia de entrar a su alcoba y ver las magníficas pinturas que Neal estaba realizando, pero sí revisaba su tobillera todas las noches repasando los pasos que hacía durante el día, vigilándolo constantemente.

‘Elizabeth tenía razón no ayudé en nada al tratarlo secamente todo el tiempo'

El agente pensaba mientras de reojo miraba a Neal. Y eso era lo que le partía el alma.

Peter Burke sintió una mini patada en las pelot…-bueno en ese lugar- al ver la mirada del chico clavada en dolor, dolor, que reflejaban los ojos más azules y acuosos que había visto en su vida, es verdad que le exasperaba que siempre anduviera fresco por todo y siempre con una mirada rebosante de energía pero no se imaginó que le afectaría tanto ver a Neal Caffrey con la mirada lastimada, como resquebrajado por dentro.

No tenía palabras para enmendar su error intentaba fijar una mirada tranquila en el chico para hacerle saber que el enojo se le había ido pero el muchacho solo estaba con la mirada baja jugueteando o aniquilando mil veces un papelito pequeño en el asiento trasero del Tauro, parecía un niño triste…y lo era.

Peter suspiro audiblemente para intentar llamar su atención… y lo logró…Neal levanto la mirada y ambos se miraron por el retrovisor, el agente Burke estaba preparado para una mirada de enojo, inconformidad y hasta ilusamente esperaba ver la típica mirada encantadora de Neal con su expresión de: ‘ ups! me atrapaste Peter' que vio hace momentos en la tienda, pero nada, nada lo preparo para la mirada que tenía ahora el adolescente era una mirada que hasta ahora nunca, nunca había visto en esos grandes orbes azules…Peter vio miedo…y eso sí le llego como una patada de campeonato en las pelot…-bueno ahí otra vez- Neal tenía miedo de él?, estaba asustado y lo mostraba en sus hermosos y temerosos ojitos azules ensanchados.

Nuevamente las palabras no cabían en la boca de Peter por lo que siguió conduciendo hasta que llegaron a casa.
Neal bajo del auto y rápido se dirigió dentro y a su habitación en ningún momento tuvo la oportunidad de cruzar palabras con el agente.

Peter entro a su hogar encontrándose con Satchmo que meneaba la cola para que lo salude, acaricio al cachorro y subió lentamente las escaleras en dirección a la alcoba de Neal, no hacía falta ser un genio para entender que debía hablar con él.

‘Tengo que disculparme con Neal, tengo que hacerlo'- pensó Peter.

Le diría a Neal que lamentaba cada una de las palabras que había dicho, toco la puerta antes de entrar, pero el muchacho no se encontraba en ningún lado de la alcoba.

Peter sintió nervios y rápidamente dijo su nombre a voz alta para saber si estaba en el baño, rápido se le cruzo por la mente que el chico podía haberse escapado.

- Neal? estás ahí?- En efecto el adolescente se encontraba en el baño, se escuchó el sonido de la ducha encenderse y Peter supo que lo había encendido para que él se fuera.
-Sí estoy en…en la ducha…ya salgo- Aun con el sonido del agua la voz sonaba triste y desquebrajada, parecía que Neal lloraba más.
- Está bien, te espero abajo- Peter salió de la habitación y bajo lentamente las escaleras.
No quería que el muchacho siga llorando por las palabras que él había dicho, no quería que este herido, no quería que este triste y más aún no quería que Neal le tuviera miedo, no eso no, Peter tenía que solucionar este gran error que había cometido.

Mientras pensaba en su siguiente accionar reviso el contestador para ver si había mensajes y había uno: de Elizabeth.

- Hola Hon, malas noticias me atrasare para la cena el catering se está alargando por la fecha… pero te lo compensare de mil amores…deja a Neal salir para su cita, saldrá con Sara… su novia… no ruedes los ojos Peter! jajaja besos…te extraño mucho… prometo apurarme, te amo!.

El agente sonrío con ternura, cuanto amaba a Elizabeth aun no estando presente le hacía sonreír, cuánto quería que estuviera aquí en este momento, ella seguro sabría que decir para calmar al muchacho, pero no, para empeorar más la situación El tardaría, Peter se quedó pensativo:

 Porque no sé que Neal sale con alguien? no me molesta que Elizabeth sepa pero….oh si como olvidar que puse una barrera para que el chico ni si quiera sea capaz de decirme que le gusta una chica o que está saliendo en citas…bien hecho agente Burke! bravo! eres un guardián excelente!'

Para aclarar más su mente se sirvió un vaso con agua y recordó lo equivocado que había pensado en actuar cuando Neal empezó a vivir en su casa, pensó que lo mejor era dejar al chico acostumbrarse por sí solo a su nueva vida, no quería presionarlo y tampoco quería involucrarse demasiado con él, tenía miedo de fallar, muchas personas ya le habían fallado no quería estar él en la lista, pensó que tal vez actuar de forma seca y tajante sería la solución a esta nueva situación que el destino se había encargado de poner en su vida.

A pesar que junto a su esposa no podían tener hijos parecía que el destino estaba empeñado en hacer a Peter Burke padre, solo que él necesitaba darse cuenta de eso.

Giro la cabeza a su izquierda y vio un bol cubierto con papel estañado, lo destapo y eran las alitas de pollo que El había preparado, eran las favoritas del muchacho seguro Elizabeth quería una cena especial pero siempre tomaba en cuenta los gustos de Neal para mimarlo aunque sea con eso, Peter pensó:

‘Elizabeth es como una madre perfecta para Neal, yo en cambio ni si quiera puedo ser un buen guardián!'

Peter termino de beber su vaso con agua con una revelación en la mente.

 Neal no necesita un guardián que lo vigile para encarcelarlo, no necesita que alguien lo juzgue por las tonterías que aun comete, no necesita más el dolor y miedo de sentir que alguien lo quiere abandonar o darse por vencido con él…el muchacho necesita un padre que lo guie, necesita un padre que lo abrace sin miedo a decirle: te amo hijo, Neal está necesitado de amor filial puro y valiente que no se rinda con los problemas que vengan… y cielos! que con Neal me saque la lotería para ganarme ataques cardiacos y encanecer toda mi cabellera este mismo año!…se valiente Peter Burke!...Neal también necesita de un padre que lo corrija cuando sea necesario'
Sintiéndose un hombre nuevo y con una enorme sonrisa en el rostro Peter volvió a subir las escaleras pero esta vez de forma rápida se moría de ganas por abrazar al muchacho, ofrecer las disculpas correspondientes y hacerle entender que lo amaba como el hijo que la naturaleza les había negado a él y a su esposa.

Neal estaba aún en la ducha conjugando sus lágrimas de frustración con el agua.

‘Porque solo puedo ocasionar problemas…Seguro Peter ya no me quiere en su casa '

No paraba de pensar y llorar en una esquina de la ducha sentado y sujetando sus piernas en su pecho, escondiendo el rostro en sus rodillas mientras el agua caía por todo su cuerpo.

Ensimismado en su llanto se sorprendió cuando Peter toco la puerta.

Toc toc toc

- Neal ya han pasado 45 minutos, es hora de salir amigo.

Le parecía tan extraño el tono de voz del agente que Neal no sabía que pensar ni que decir, Peter supuso que el chico no quería dirigirle la palabra, era razonable pensar que aún estaba molesto por lo que le había dicho.

-Vamos Neal te prepararé un batido y El dejo las alitas de pollo que tanto te gustan.

El muchacho levanto la cabeza y ensanchó los ojos… ‘ Peter parece…parece…feliz?'- pensó.

-O quieres que llame a los bomberos?

‘Eso era una broma?...es Peter quien esta fuera?' - se decía Neal.

-Sal Neal, debes estar todo arrugado como una pasa.

 SÍiiiii es una broma! definitivamente no es Peter debe ser un alienígena que ha secuestrado a mi guardián! O…tal vez…tal vez… aun cuando quebranté una de las reglas de oro: NO FALSIFICAR aun así Peter quiere que este aquí!'

Era el turno de Neal para sentir una patada de campeonato en las pelot…-bueno ahí otra vez- el agente no parecía querer echarlo de su casa y no podía evitar sentir felicidad al pensar eso, sonrío ampliamente dejando ver sus blancos dientes, empezó a enjuagarse los ojos rojos a pesar que el agua seguía cayendo sobre su rostro y cuerpo no quería que Peter viera que había estado llorando.

Estaba a punto de contestar cuando la puerta se abrió de un golpetazo que había dado el agente Burke con toda su humanidad y fuerza.

Neal se acurruco más en su rinconcito atrayendo más las piernas a su pecho levantando la cabeza y ensanchando sus ojos azules al ver a Peter, lo había asustado mucho –‘ porque ha hecho eso?'- pensó el muchacho.

El agua continuaba cayendo y el vapor invadía la habitación pero aun así podía distinguir el rostro del agente; Peter estaba blanco como papel como si el alma se le hubiese salido, su respiración era muy audible y entrecortada, tenía el rostro preocupado estaba totalmente desencajado.

El hombre mayor había estado muy preocupado por la no respuesta del chico aunque para Neal hubiesen sido pocos minutos el que el agente haya estado preguntando por él en la puerta del baño la realidad era que pasaron 20 minutos en los que Peter esperaba respuesta de él y al no escuchar nada, pensó en los distintos escenarios trágicos que pudieron suscitarse; Neal podía haberse resbalado y lastimado cayendo inconsciente y esa imagen fue la que impulso a Peter a derribar la puerta y ver qué pasaba con su joven a cargo.

En cuanto vió al muchacho en perfectas condiciones fue como si el alma recién volviera al cuerpo del agente, recién pudo empezar a respirar normalmente.

Agarró el salto de ducha azul, apagó la ducha y sacó a Neal de su rincón.

- Porque no me contestaste? Creí que te pasó algo.

El agente rápidamente le puso el salto de ducha a Neal mientras decía con una voz muy afectada, es más parecía que enormes lagrimones se habían formado en sus ojos.

-Creí que habías caído y estabas inconsciente en el piso.

Neal estaba todavía con expresión sorpresiva pero ahora totalmente cubierto con la toalla, Peter tenía puestas las manos en el costado de la cabeza del muchacho mirando fijamente a sus ojos azules y transmitiendo todo el miedo que sintió cuando pensó que Neal se había hecho daño.

- Creí que te perdía- lo abrazo fuertemente y le dio un beso en la cabeza dejando salir una lágrima- No me asustes así, no puedo perderte eres muy importante en mi vida y en la de Elizabeth.

 Importante?...Peter está preocupado por mí?...por eso entro como loco a la ducha?....uhmmm bueno exageradamente preocupado!... pero eso quiere decir que me aprecia?...eso quiere decir que me quiere?- el muchacho pensaba en su interior pero no pudo evitar decir:

- Peter yo…yo no merezco que te preocupes por mí…so…solo soy un criminal.

El agente suspiro con remordimiento en su expresión y dijo:

- No Neal, no lo eres… no debí decirte eso… no tengo justificación para las fuertes palabras que te dije en el automóvil, me deje llevar por el enojo y no pensé ni un segundo lo que estaba saliendo de mi boca solo era mi enojo hablando, tú no eres un criminal.

Peter abrazo al adolescente acercando el rostro del chico a su pecho, haciendo que su traje se moje con el cabello oscuro y su rostro aun goteando.
Neal correspondió el abrazo pero el remordimiento por sus acciones estaban torturando su mente y corazón así que con lágrimas en los ojos y la voz desquebrajada dijo:

- Pero yo falsifique snif snif active mi alias snif snif y…y…y compre algo muy costoso con la tarjeta snif snif snif.

El agente volvió abrazar al muchacho y empezó a dibujar círculos en la espalda de Neal tratando de calmar el incesante llanto.

- Eso es algo por lo que tú y yo vamos a tener una larga conversación- Peter dijo poniendo su tono más severo al igual que su semblante- no voy aceptar ninguna excusa o justificación para lo que has hecho porque eso es algo que sabes NO debes hacer- relajando su expresión y agarrando la barbilla del chico para elevar un poco su rostro y lo mirara directamente a los ojos, agrego- pero sí necesito saber porque lo has hecho.

Neal estaba realmente confundido por lo que decía el agente, en el corto tiempo que había vivido en la casa Burke las reglas habían sido establecidas el primer día pero sin dificultad él podía escabullirse a todas ya que el agente parecía no importarle si las cumplía o no y él era demasiado astuto como para dejarse notar en el incumplimiento de ellas.

Era de Elizabeth de quien debía tener mayor cuidado para no hacerse atrapar en: salto de clases, salidas nocturnas pasando el límite del permiso y su más reciente desobediencia la falsificación.

Hasta ahora no había tenido que dar a ninguno de los Burke explicaciones por sus actos y eso era también porque hasta ahora no lo habían atrapado desobedeciendo las reglas, sin embargo nadie nunca le había preguntado: porque lo hiciste? Realmente a nadie le dio importancia saber el porqué, solo importaba que eran actos ilícitos, malos y punto estaba clasificado como una persona mala o criminal, pero ahora el agente lo sorprendió.

- Yo…yo quería regalarle algo a Sara y snif snif me…me equivoque snif no debí falsificar la tarjeta…snif snif lo lamento no quiero meterme en problemas ni a ti snif snif snif.

Peter lo había previsto en el fondo de su corazón, Neal no falsificaría para hacer daño a nadie solo era un muchacho travieso exponiendo al límite sus capacidades, un adolescente común tal vez hubiera sacado 50 o 100 dólares de la cartera de su mamá pero no Neal, él era diferente a los demás él tenía que falsificar la card centurion!.

El agente observó con detenimiento al chico; sus ojitos azules estaban agrandados a punto mirada de cachorro abandonado con tonos rojizos- signo de su llanto- el cabello desordenado y mojado, la piel pálida y toda una expresión de arrepentimiento genuino, Neal parecía mucho más joven de lo que era…incluso parecía un niño que sabía había cometido una travesura muy muy pero muy mala. Peter oculto bien una sonrisa, solo era eso… un niño que rebasaba los límites que podía y Neal a su antojo que sobrepasaba los límites que sus expertas habilidades le permitían. Pero eso sería hasta el día de hoy.

Paso un tiempo para que Neal se calmara y cuando lo hizo el agente dijo:

- Si necesitabas dinero porque no me lo pediste?
-Puedo cuidar de mí mismo, además no necesito que gasten más dinero en mí.
-No es un gasto y no es obligatorio a mí me encantaría darte dinero para que salgas con tu amiga y ya no tienes que preocuparte de tu persona para eso estamos Elizabeth y yo eres prácticamente un niño Neal, no necesitas estar falsificando nada, la próxima vez pídeme la suma que necesites- Neal puso una mueca graciosa en su rostro a lo que el agente agrego- está bien puede que tengamos que acordar la suma apropiada pero no te daré una miseria- los ojos de Neal se iluminaron- y tampoco una fortuna para que andes regalando el cielo y las estrellas a las chicas- Y el niño hizo un gracioso puchero en los labios.

Peter volvió abrazarlo y pensó ‘ que bien se siente verte siendo un chico de tu edad, oh Neal eres mi niñito travieso' le dio otro beso en la frente y volvió con ambas manos a apartar su cabeza, esforzándose para que su tono de voz no reflejara miedo hizo una pregunta que no quería pero debía hacerla.

-Que es lo que le compraste a Sara?

Y por respuesta Neal puso la típica expresión Caffrey: poniendo los ojitos azules expuestos al exponencial, la sonrisita pícara hermosamente dibujada en sus labios como si dijera sin mencionar palabra: ups! ok te digo… pero ojo que no es para tanto Peter!...es solo un regalo!

Aunque el agente no demostró en su porte sentir inquietud ante la expresión de Neal, sus pensamientos no seguían ése mismo rumbo.

 Se valiente Peter Burke! no importa lo que haya comprado no puede ser tan malo, digo, Neal no está loquito como para haberle comprado el cielo y las estrellas a Sara… verdad?...oh no, ésa sonrisita no se borra de su rostro…oh no Neal….se valiente Peter Burke! Neal necesita de un padre!...Neal te necesita!'



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