martes, 24 de marzo de 2015

EN CASA DE HERRERO... CUCHARA DE PALO 18.



18.
Eran sobre la  una de la madrugada cuando Carolina se desveló, normalmente tras un día de playa dormía a pierna suelta, pero ya llevaba un buen rato dando vueltas en al cama. Ya desquiciada, salió de la cama y se fue a la cocina a por un vaso de leche, a ver si eso le ayudaba a dormirse. Pero al entrar en la cocina se encontró a su cuñado sentado a la mesa de la cocina con la mirada perdida.
-                ¿Tú tampoco puedes dormir? (le preguntó Carolina, abriendo la nevera)
-                No, hace mucha calor.
-                Si, debe ser el calor (dijo sentándose a su lado). Nico me ha dicho que hoy has tenido bronca con Rui.
-                Sí (suspiró) ya ha entrado en la adolescencia. Rui ya es un adolescente (dijo triste).
-                No pueden quedarse chiquititos por siempre, Francisco (dijo sonriendo).
-                Lo sé, pero…el tiempo pasa tan rápido, ¿No sientes como si se te escapara entre los dedos?
-                Últimamente sí. Nico es cada vez más reservado, sabes siempre hemos sido muy cómplices el uno del otro, pero ya hace un tiempo que noto que no me lo cuenta todo (ahora fue el turno de Carolina de ponerse melancólica).
-                Se nos están haciendo mayores (puso una mueca de no estar conforme) Pero no es eso lo que me estaba rondando la cabeza.
-                ¿entonces?
-                Es Oliver y todo el asunto de las pastillas.
-                A ti tampoco te cuadra, verdad?
-                No, conozco a mi hijo, no soy idiota, supongo que habrá fumado algún que otro porro, ¿pero anfetaminas?
-                Sí, fuera coca, lo siento, cuñadito, no me mires así, pero si fuera coca no me sonaría tan inverosímil como lo de las pastillas. Los que toman coca son personas más bien extrovertidas como Oliver, los que tomaban anfetas eran tíos que querían abarcar más de lo que podían.
-                ¿Como Armando? (dijo alzando una ceja pero sonando descorazonado)
-                Sí, a mi también se me pasó por la cabeza la posibilidad que fueran de él. Pero Armando es un buen chico, sabe muy bien donde te conduce ese tipo de mierdas (dijo Carolina que al igual que Francisco deseaban que sus sospechas fueran infundadas).
-                 Eso me repito yo, pero no me cuadra, Carolina. Oliver no es de ese tipo, prefiere suspender e inventarse cualquier excusa que hincharse a pastillas y trabajar como un loco para recuperar el tiempo perdido. Además, des de que le pillara las pastillas, no le he visto agarrar un libro, si tanto le preocupaba suspender como es que ya ha tirado la toalla. Sé que Oliver tiró la toalla hace meses.
-                Y no hay que olvidar que dio negativo, aunque ese frasco estaba por la mitad.
-                Pero Armando no es del tipo que dejaría que otro cargara con su culpa. Lo conozco tienen un concepto de lo correcto muy fuerte, a veces juraría que incluso más que yo.
-                Sí, eso es lo que hace que no acabe de cuadrarme la teoría de que Oliver está encubriendo a Armando en este asunto de las pastillas.
-                Ya, pero por otra parte des de que encontráramos esas pastillas esos dos parecen inseparables. Venga, ni les oigo pelearse. Esos dos que siempre están como perro y gato y ahora solo hacen que bromas inocentes. No oigo ni amenazas ni portazos, ni acusaciones…un remanso de paz entre esos dos.
-                Sí, eso es más que inquietante ¿si quieres puedo preguntarle a Oliver si está encubriendo a Armando?
-                Como si a ti te fuera a decir la verdad, venga Carolina, ese hijo mío tiene un don para el engaño, ¿No sé de donde habrá sacado esa pasión por las mentiras?.
-                Bueno, algo de su tía, aparte de la belleza, tenía que sacar jajaja
-                No tiene gracia Carolina, además el chico ha salido a mi lado de la familia (refiriéndose al físico).
-                Ya te hubiera gustado a ti ser la mitad de guapo que es Oliver jajaja (y  Francisco no pudo más que sonreír, ya de muy pequeño los paraban en la calle para decirles que guapo era el niño, y al hacerse mayor en vez de afearse se había convertido en un chico que bien podría salir en uno de esos anuncios de la televisión). Peor ahora en serio, ya le sondearé. Pero si andamos en lo cierto ¿Qué vas a hacer?
-                Estoy perdido, carolina. Es en momentos así que me siento más solo que nunca.
-                Eyyyy cuñadito, no estás solo. Míralo así, cuentas con una experta en estas cosas.
-                No lo digas como si fuera algo bueno ¿quieres? (la riñó)
-                Ese es mi cuñadito jajaja.

A la mañana siguiente Carolina se hizo la rezagada para poder hablar con Oliver a solas. Pero si en algo era bueno era Oliver era en evadir la verdad. Así que la conversación no fue muy fructífera.  Debía de reconocer de haber sido ella la mitad de buena ocultando cosas que su sobrino aún estaría metida en las drogas y sus padres jamás la habría echado de casa.
Estaba claro que de Oliver no iba a sacar nada así que probaría suerte con Armando. Armando era más fácil de manipular que Oliver. Se fue al bufet y habló con Francisco para ver que opinaba. Francisco esperaba que Oliver le hubiera sido más confidente con su tía que con él, pero tampoco se sorprendió tanto.
Esa misma tarde...
- toc toc (Carolina Picó a la puerta de Armando y Oliver).
- Adelante (dijo Armando)
- Hola, Sobrinito ¿Estudiando duro? (dijo sentándose en la cama de uno de los chicos).
- Sí, los profesores se han puesto de acuerdo para poner esta semana tres exámenes,  mates, lite e inglés.
- ¿Y pueden hacer eso? Estoy segura que hay algún convenio que prohíbe eso jajaja
- Jajaja si lo hubiera ya lo habríamos encontrado.
- ¿Y tu hermano? ( mirando al escritorio de Oliver) Pensé que estaría aquí, como desde que tu padre le pilló con las pastillas,  sois prácticamente inseparables (Armando se puso tenso y a Carolina le costó no sonreír).
- No lo sé, creo que anda con Dani.
- Tu padre y Yo estamos muy preocupados por Oliver (dijo Carolina mientras ojeaba uno de los libros que tenía Armando en su escritorio). Sabes, yo empecé con pastillas también (mintió descaradamente pero Armando no tenía ni idea de como empezó su tía solo sabía que acabó entre rejas por trapicheo con drogas. Y eso lo sabía porque Cuando la metieron en la cárcel, él no era tan pequeño como para no acordarse) le he dicho a tu padre que no sería una idea descabellada ingresarlo en una clínica de desintoxicación. Ojalá hubieron hecho eso por mí. Ahora Nico, Juan y yo seríamos una familia normal, en vez de... (puso cara triste) ¿Sabes que Sergio se lleva a Juan? (Armando abrió mucho los ojos) Sí. No quiero que a Oliver le pase lo mismo. Me recuerda tanto a mí a su edad...yo también era puro encanto y puras mentiras ¿sabes?
- ¿Tú? (no dejaba de estar asombrado)
- Cuando tomas drogas, las mentiras son parte de tu vida. Si más no, si lo quieres mantener en secreto, e incluso después que lo sepan sigues mintiendo para que te dejen en paz y poder seguir drogándole.
- Oliver dio negativo. Solo pensó en tomarlas pero sé que no lo iba a hacer y seguro que ahora sí que no lo hará.
- Dio negativo en anfetaminas pero Eso no significa que no tomé drogas. El THC puede eliminarse en unas tres semanas en sangre (Armando sabía que Oliver fumaba porros de vez en cuando, no era un porrero como alguno de sus amigos, pero alguna vez había fumado). En unas semanas cuando ya se le haya olvidado le haremos una prueba más amplía y definitivamente si da positivo...
- ¡Carolina no! (le detuvo Armando. Carolina había pescado una gran pieza, ahora solo tenía que recoger el carrete) Oliver no...Él no...las pastillas no... (Armando no sabía cómo decirlo) Oliver jamás tomaría esa mierda. No mintió cuando dijo que no eran de él.
- Armando tu padre y yo sabemos que no eran suyas (Armando la miró como si Carolina fuese un espectro aterrador)
- ¿Lo sabéis?
- Claro que lo sabemos. Francisco es vuestro padre, Os conoce mejor que vosotros mismos.
- Pero...¿Por qué  no ha dicho nada? Porqué sigue tratándolo como si estuviera bajo el punto de mira.
- Porque os conoce bien, y sabe que acabaréis por hacer lo correcto. Pero… Armando ya ha pasado bastante tiempo ¿No crees? Y si yo fuera tu padre empezaría a poner en duda vuestro buen juicio para hacer lo que es correcto y (Carolina no había acabado su discurso que Armando ya se le habían saltado las lágrimas).
- Yo quería hablar con papá, pero tuve miedo y cuando Oliver Me dijo que no tenía sentido, porqué él ya se había llevado la bronca, no dudé en hacerle caso (Armando respiró hondo).
- ¿Cuánto hace que tomas anfetas?
- Desde los finales...pero ya no tomo...lo juro...se lo prometí a Ólíver,  créeme nunca más, fui un idiota.
- Sí, de campeonato (Armando no se esperaba esa respuesta) No me mires así, lo fuiste. Y aparte de idiota un mal hermano...(Armando bajó la cabeza) Sabes perfectamente lo que tienes que hacer, Armando.
- Papá me va a matar (inconscientemente hizo pucheros).
- ¿Matar? NO. Ambos sabemos que tu padre no mataría a una mosca y mucho menos a su hijo.
- Le dio con el cinturón  (susurró).
- Armando, no estamos hablando de saltarse una clase O insultar a tus hermanos, estamos hablando de drogas,  ¡Las anfetas son drogas, Armando!
- Pero... (dijo mordiéndose el labio)
- Tienes 17, no te darás ni cuenta y serás un adulto, es hora que empieces a darte cuenta que nuestras decisiones tienen repercusión en nuestras vidas Y en las vidas de la gente que queremos y nos quieren. Y las malas decisiones tienen nefastas consecuencias.  Mírate, estás ahí sentado gimoteando porque no quieres que tu papaito te caliente el culete  (dijo expresamente en un tono infantil) pero eres afortunado porque eso es lo menos que te podría pasar cuando tontas con drogas nada bueno acaba. ¡Mierda, Armando! ¿Qué no te acuerdas de toda la mierda que pasó esta familia por mi culpa? (Carolina dijo enfadada. Armando bajó la cabeza avergonzado).
- Lo recuerdo (dijo con tristeza), pero no es lo mismo, yo solo lo hice para mantener mis notas, no lograba concentrarme como antes.
- Armando, no eres una máquina, hacía poco que habías perdido a tu madre, nadie hubiera dicho nada si tus notas hubieran bajado, ¡Joder, nadie hubiera dicho nada si hubieras suspendido!
- ¡Yo sí! (dio un golpe en la mesa de puro coraje)
- Armando, las cosas no siempre van como uno quiere, incluso esforzándose tanto como sabemos que tú te esfuerzas, ni siquiera eso es garantía de nada.
- Papá siempre dice que si trabajas duro, obtienes todo lo que quieres.
- Eso lo dice porque quiere lo mejor para vosotros, y sabe que nadie regala nada, las oportunidades no llaman a tu puerta,  es el buen trabajo realizado lo que te abre puertas. La suerte es un factor tan pequeño que ni debería tenerse en cuenta.
- Deberías tener esta charla con Ólíver.
- Oliver sabe bien que esto es así, otra cosa distinta es que le importe. Venga, armando ambos sabemos que ha escogido derecho por comodidad...porque no necesita demostrar ser bueno...al salir tendrá trabajo garantizado. Pero tú no eres Oliver. Tienes razón eres un chico que trabaja duro, que le gusta las cosas bien hechas, no te conformas con un simple aprobar, te pareces más a tu padre de lo que ambos os gusta reconocer, sois perfeccionista hasta la extenuación. Pero hasta tu padre se tomó unos meses después de la muerte de tu madre, y ahora solo trabaja en ciertos casos. Porque es humano y tiene limitaciones. Eso no es rendirse, no es ser más débil o ser incapaz o ser conformista, es ser humano, Armando.
- Tienes razón, pero Oliver también. Si salgo ahora ahí fuera y le digo a papá que las pastillas eran mías, no servirá de nada. Yo no voy a tomarlas nunca más, le di mi palabra a Oliver, y papá se cabreará con Oliver por haberle mentido con algo tan serio como esto (dijo fríamente Armando. Carolina, parpadeó varias veces, no se podía creer esa nueva actitud de su hijo).
- ¿Y dónde ha quedado eso de hacer lo que es correcto?
- Si solo fuera yo el que estuviera en el punto de mira, lo habría hecho la misma noche en que Oliver me contó que habían encontrado las pastillas y que se había echado el las culpas. Pero no es así, Oliver se sacrificó por salvar mi trasero y no voy a hacer que ese sacrificio sea en vano.
- Todo eso solo me suena a excusas para no afrontar las consecuencias.
- Que te suene a lo que te dé la gana (dijo Oliver des del quicio de la puerta). Carolina, si papá supiera que fui él, ya habría venido a rustirnos el trasero. Ya has oído al empollón, no va a volver a tomar esa mierda, y él no es como nosotros (dijo con malicia) el cuando dice que va hacer una cosa lo hace.
- Oliver, quizás creas que le estás haciendo un favor, pero
- Pero nada Carolina, llevas aquí mucho años, ya deberías saber que Armando no es del tipo de recurrir al camino fácil, sino fuera por la muerte de mamá, ni se le había pasado por la cabeza, pero eso ya es agua pasada ¿Verdad Armando? (Armando asintió con la cabeza) No tiene sentido abrir esa herida otra vez. Nos está costando, cada uno a su manera,  pero estamos aprendiendo a seguir con nuestras vidas sin ella. Tiene 17 años, joder Carolina, dale un poco de cuartelillo. Se equivocó, vale, pero es algo que no va a pasar, así que olvídalo, pasa página, borrón y cuenta nueva, a otra cosa mariposa… Él no es tú.
- Yo no era yo hasta que lo fui (dijo con veneno en sus palabras).
- No me jodas, Carolina. Las drogas puede que jodieran tu vida pero tu ya estabas jodida cuando empezaste a tomarlas. Mamá y tía Elena vivían en la misma casa, con los mismos padres, la misma escuela y no acabaron así. El problema eras tú, y Armando no es de ese tipo. Así que (dejándole espacio para que pasara por la puerta) no te metas.
- Tu padre lo sabe (dijo muy seria a Oliver, jamás se había puesto seria con Oliver, lo cierto es que esos dos eran como colegas).
- Mi padre sabe que yo no he tomado anfetas alguna (dijo Oliver). Eso es lo que sabe, ¿Recuerdas esa analítica que me hizo hacer? Lo demás son especulaciones. Y vamos a dejar que siga así. Si papá tuviera lago más que sospechas, no serías tú la que estará aquí hablando con nosotros.
- Tu hermano me ha reconocido que eran de él (dijo enfadada Carolina con Oliver, se sentía un poco traicionada).
- Es tu palabra contra la nuestra.
- Esto no es un juicio Oliver, tu padre…
- “Mi” padre no hace ni un año que se ha quedado viudo, tiene que encargarse de sus 4 hijos y del tuyo (esto lo dijo con malicia, no le gustaba comportarse así con su tía, pero se trataba de Armando y en ese caso no lo dudaba), y acaba de incorporarse al trabajo después de unos meses de estar fuera de circulación. Creo que mi padre ya tiene suficiente quebraderos de cabeza para irle con un tema que ya está más que solucionado ¿no crees?
- Oliver, Francisco es el padre aquí no tú, eso es algo que debe decidir él.
- Me la trae floja lo que tú creas. Lárgate y deja a Armando en paz (Carolina respiró hondo y se fue directa hacía Oliver).
- Solo intentaba haceros un favor, pero allá vosotros...
- Eso allá nosotros (dijo una vez hubo traspasado la puerta y salido de la habitación. Oliver cerró la puerta de la habitación en cuanto su tía salió). ¿tú eres idiota, o qué? No habíamos quedado que no le dirías nada a papá.
- Y no lo he hecho, ella vino y empezó
- ya sé lo que Carolina ha hecho, lo probó esta mañana conmigo, pero yo me callé, joder (Oliver estaba aún calentito por la discusión con su tía) Sino llegó a entrar en ese momento…
- No iba a decirle nada a papá (dijo a la defensiva Armando)
Pero se lo has reconocido a ella, joder, armando, tan listo que eres y a veces pareces tonto perdido…Carolina no es tu amiga, es tu tía, y en esta guerra está del bando de mamá y de papá (dijo sin darse cuenta que había mencionado a su madre). Sobre todo en esto. Sabes lo paranoica que es con eso de las drogas. Pobre Nico cuando llegue a la adolescencia, lo va a tener magro (dijo tirándose sobre su cama).
-                ¿Crees que se lo va a decir a papá?

-                Espero que no, espero que lo del rollo del pobre viudito haya colado (dijo buscando el teléfono en su mochila). Pero lo sabremos pronto. Si papá entra por esa puerta como un loco es que le ha ido con el cuento y le ha creído (Y Armando y Oliver se quedaron mirando esa puerta como si detrás se escondieran todos los males del mundo).

5 comentarios:

  1. Me encanto espero la continues pronto quiero saber que va a pasar si la tía los delata o Armando se lo dice el mismo a su padre.

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  2. He esperado con ansia tu actualizacion Little bonita, y estoy mas que satisfecha.... estoy QUE COMO ANSIAS.... sabes, estoy dividida en muchos pedacitos por tu historia
    por un lado quiero que su padre sepa la verdad y asi ve con otros ojos a Oliver, a veces pienso que Oliver ya como que le da lo mismo la opnion de su padre que no hace otra cosa que sacarle en cara que siempre miente, bueno no es una cualidad... pero se hace mas sinverguenza jjjjj si se lo repiten siempre, y que sepa que lo hizo por su hermano en parte le da puntos ante su padre por la nobleza de sus actos, aunque no es lo correcto, porque vamos sn drogas, son anfetas, es mierda loq ue el chico esta consumiento y aunque jure que no lo volvera a hacer y yo le creo, creo que merece ayuda para superar los traumas de la muerte de su madre
    pero por otro lado no quiero que lo sepan, porque es casi garantia que de enterarse seran castiagos por papa, y digo castigados porque una mentira como esa no es para premiar, aunque si elogiar el querer ayudar.
    pero como todo bonita, ES LO QUE ESPERAMOS TODOS, AUN CUANDO NOS DUELA LA CORAZONCITO........ LA TUNDA DE PAPÁ ES LO QUE ME TRAE CON ANSIAS
    si, sueno a malvada, pero lo disfruto jjjjjjjj
    y esperare con paciencia tu actualziacion porque siempre tienes un elemento sorpresa en tus relatos
    pero eso no significa que me haya olvidado de HANS, de BRUNO y de Valentino? no recuerdo bien su nombre pero estaba muy engancahda con al historia y me has dejado y no solo a mi con la espectativa de más
    pero dejare que la musa acuda a ti y te de un soplo para que sigas escribiendo de todos ellos que los extraño muchisimo

    un abrazo guapa, que tengas un lindo dia

    Marambra

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  3. Aunque no me creas, Little, yo estaré feliz de que Armandito salga bien librado de éste problemón en el que está metido. Ya entendió lo que estaba haciendo mal =P así que no le veo la necesidad de una paliza, jejeje... (creo que me equivoqué de blog!) =D pero bueno, todo queda en tus brillantes manos! Me encanta Oliver! Será un buen abogado!

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  4. ooo me dejas con la intriga... espero que lo puedas continuar pronto... me encanta la forma con la que se protegen esos dos... pero la verdad es que espero que el padre se entere sobre las pastillas y sobre su hijo... mmm... no es por ser mala con los muchachitos pero les faltas un jalón de oreja a los dos... ;)

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  5. Waaooo Oliver se puso firme y sin contemplaciones hacía l tía!!!!
    Me gusto como lo defendio a su hermano!!!
    Ah espero cn ansias tu sguiente actualización ya quiero saber si la tía va co el chisme o se que da callada!!!
    Como siempre as creado otra maravillosa familia!!!

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