miércoles, 11 de septiembre de 2013

Avanzar… no avanzar no es una opción


Capítulo veintisiete
Avanzar… no avanzar no es una opción


Observo a mi hijo siempre con esa pose de superado por la vida, pero en realidad está perdido, no estoy de acuerdo con Sean de no haberlo inscripto en el colegio porque tienen demasiado tiempo libre y no hace nada, Sean siempre contaba de lo deportista que era Steve, pero en todos estos meses el único deporte es el que hace con la novia y eso no me gusta nada lo mismo que mi Evi, niños pero quién los puede culpar, bueno lo importante es que no permitiré que Steve siga así, veo como el brillo en sus ojos se apaga a diario, Sean parece no darse cuenta, Evan con la nueva novia, el colegio, el deporte, los amigos, no nota la brecha que se abre entre los dos, ya que Steve no está involucrado en nada de eso, Evan llega muerto a dormir, Steve que duerme todo el día mientras Kathya está en el colegio o en algún deporte, luego salen un rato que no siempre es mucho y luego de vuelta a casa a dormir, lo peor de todo es que ayer le dijo a Sean que el próximo año no volvería al cole, que daría los exámenes libres y que seguiría con su rutina de no hacer nada, si ya hay días en que ni se saca el pijama, Sean cayendo en sus viejos hábitos con Steve le dijo que lo pensaría pero estoy segura que le dejará hacer lo que quiere, porque no quiere más conflictos con Steve, no entiendo a mi marido bueno, no es mi marido no entiendo a Sean en un segundo es el padre más estricto y comprometido con los chicos y solo con Steve le deja hacer las tonteras que se le dé la gana solo para no discutir, aun temiendo que su nene de cristal se rompa en mil pedazos si le dice que no ha algo y yo no voy a permitir que sigan así, no hay mejor momento que el presente, sobretodo porque Evan está en el cole y mis dos fieras están responsado, viendo la tele.
“Chicos tenemos que hablar” al ver la cara de Steve debí mejor hablarlo a solas con Sean y después informarle, no lo sé, tal vez, si tenga derecho a exponer su punto.
“Si Angi” dijo Sean sentándose, Steve sigue echado cuan largo es sobre el sofá. “Steve”
“papaaaaaaa, estamos viendo la peli” al ver la cara de estoy contando y pobre que llegue a tres de su padre lo intentó conmigo. “mami, podemos terminar de ver la película primero” yo no tuve que responder porque Sean apago la tele y aun no sé cómo pero maniobró a Steve para dejarlo sentado a su lado y le sostuvo la mano como previniendo un enfrentamiento.
“estuve pensado que ya es tiempo que te inscribamos en el colegio”
“QUE NO” grito Steve.
“Creo que tienes razón” dijo Sean, que al parecer estaba tan cansado como yo de que Steve estuviera echado en el sofá todo el día, si ya ni se molestaba en ir a la casa de Kathya, era ella la que lo iba a ver todo el tiempo.
“ya termine este curso” parecía que estaba a punto saltar contra Sean.
“si, pero no te hará mal ir de oyente” le dije.
“no voy a ir” se dispuso a salir, yo le cerré el paso, a Steve no pareció importarle, a Sean sí, lo tomo del brazo con el que se disponía a apartarme de su camino y le dio un sonoro palmetazo en poto, fue muy fuerte, sobre todo porque estaba con el pantalón de pijama que no lo protegía mucho, Steve empezó a forcejear con Sean, mi crio estaba en plan pataleta total, Evan no es así, no me puedo imaginar a Steve de pequeño, por más que he visto mil veces los mil videos adorables de mi niño para poder hacer mío cada detalle perdido de mi hijo, porque es mío.
“Déjame papá, déjame no voy a ir, no voy a ir ya te lo dije, esa” me indico con el dedo, al parecer no soy mamá si no le gustan mis intervenciones, “no pude meterse, esa no es nada mío” yo no podía reaccionar estaba herida, sentí el sonido de la mano de Sean hacer contacto con la boca de Steve, solo lo oí porque había cerrado los ojos para evitar que cayeran las lágrimas traicioneras.
“no le hables a Ángela así” Sean no dijo mamá como decía siempre, de pronto me doy cuenta que estoy sobrando, decido dejarlos discutir, “es tu madre Steve, tú mismo la elegiste” le grito mientras le daba otra palmada esta vez en el poto.
“ay papá, duele, me haces daño, yo no le hablé mal a mamá yo no le hablé mal” le repetía y movía su cabecita con una convicción tal que si yo ni hubiese estado ahí le creería, “yo solo no quiero ir, no tiene que meterse porque ya lo conversamos antes, papá lo conversamos con el médico” será cínico mi hijo, no se acuerda nunca de las ordenes médicas y de lo único que no fue ni una orden ni recomendación se acuerda al tiro.
“el médico dijo que dieras los exámenes libres para que no perdieras el año, no dijo nada de no volver al colegio” le rebatió Sean.
“no voy, no voy y no voy” dijo dando de pisotones tanto así que me parecía un bebe en pataleta, estuve tentada a dejarlo nariz en la esquina hasta que termine su berrinche pero su padre tenía otros planes, con una agilidad que aún me sorprende dejó a Steve sobre sus muslos comenzó a darle nalgadas,
“Steve se acabaron las pataletas”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“déjame me duele, no me pegues”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“Deja el berrinche Steve Hyuga”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“no voy a ir al colegio nunca más”
En ese punto yo estaba por arrebatárselo de las manos y darle una zurra yo misma, pero Sean le bajo al pijama y el bóxer, me conmoví al ver su potito rojo.
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“no discutas más, vas a ir y punto”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
Steve se puso a patalear
“me duele Owwwwwww”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“me duele, papito me duele mucho, me duele”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“vas a ir al colegio porque no puedes seguir estancado”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“buaaaaaaa no estoy estancado, no quiero hacer nada, no quiero”
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“si lo estás, hijo llevas meses haciendo nada bebe, tú no eres así” Sean por fin comprendió porque yo quiera que Steve volviera al colegio.
“no lo estoy, no lo estoy” Steve se puso como frenético irracional, comenzó a forcejear con Sean.
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!
“basta” ¡ZAS! le dio una palmada realmente fuerte en el centro del trasero.
“NO DÉJAME, NO QUIERO VOLVER, NO QUIERO” Sean volvió a levantar su mano, pero se lo impedí, Steve no suele comportarse así, me preocupo, le acomode su pijama y lo levante y le besé su frente.
“Steve bebé que tienes” le dije con dulzura mientras le besaba su carita llena de lágrimas.
“no quiero, no quiero”
“bebe, mi vida, tranquilito, hijito que tienes”
“NO QUIERO, NO QUIERO, NO QUIERO, DÉJAME NO QUIERO” gritaba ahogándose en su propio llanto y tartamudeando, Sean me lo arrebató, Steve estaba mostrando los síntomas de comenzar una crisis, lo recostó en el sofá.
“Tráeme un vaso de agua con azúcar y las gotitas” es la medicación que le dejó el médico ante una crisis, fui corriendo, al volver encontré a Sean llorando con Steve, mi niño le confesaba sus miedo, el miedo a volver a atrás, a volver a estar solo, para Steve el volver a clases significaba soledad, volver a ser el niño perdido sin ganas de vivir.
“no puedo, no me obligues papá”
“eso no va a pasar bebe, no será como antes”
“no puedo” mi hijo lloraba amargamente.
“Steve hijo todo será igual, tesoro iras a clases con la Kathya la Made, tu hermano, podrás hacer deporte”
“nooo yo solo hacía eso porque estaba solo”
“ahora podrás hacerlo solo porque te gusta” le dije
“hijito, papá está aquí no irá a ningún sitio, tu mamá y tu hermano no se esfumaran por que hagas cosas, bebe no necesitas estar todo el tiempo en casa solo para estar seguro que no desaparecerá alguno, somos una familia, somos reales y te amamos”
“si se olvida de mi” le dijo a Sean preocupado.
“Steve soy tu madre, no estoy preparada de verte aquí todos los días perdido, mi corazón tienes que recuperar tu vida, un pasito a la vez tigrecito ir al cole un deporte, vestirte todos los días” le indique el pijama,
“me gusta el pijama” se quejó chiquito, ya había dejado de llorar y me regalo una sonrisa.
“que dices principito ¿lo intentamos?” le pregunto Sean, yo no estaba de acuerdo, con preguntarle pero Steve me sorprendió.
“lo intentamos” dijo sonriente.
Yo sonreí y le di un beso en la frente, levante a mi hijo de un brazo y le di una palmada.
“a la ducha, te vistes y vamos a celebrar”
“no me pegues que duele mucho”
“y porque será” le pregunte.
“porque él me pego” indico a Sean.
“y porque sería”
“porque me porte mal” reconoció con un puchero adorable “ya no quiero hablar de eso, donde vamos a celebrar”
“vamos al colegio vemos lo de tu inscripción” agregue antes de que cambiara la cara “pasamos por tu hermano y las chicas, luego vamos a comer donde gustes”
“podemos comer pizzas y ver una peli”
“claro a la ducha”
“Y podemos ir a los carros chocadores”
“si podemos tigrecito ahora a la ducha” dijo Sean.
“si a la ducha, a la ducha” se fue repitiendo mientras caminaba. Mi niño se ve mejor, más tranquilo, todo va avanzando, Steve está avanzando en el camino de la recuperación. 

3 comentarios:

  1. LittleHoshi: Buen equipo formaron Sean y Ángela.

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  2. Genial padres comanos a la obra me gusto el cap coincido con Little buen par de padres
    mrambra

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  3. Hoooolaaaaaaaa!!!!

    Lady qué bonito estuvo el capítulo del tigrecito!!!! :D .......Aunque me dio penita Steve, pensando en que su familia desaparecerá si él no está para cuidarla!! Snif snif...
    Ay pero qué lindoo, siii, yupiii, que vaya al cole, ejejej... (yo estoy más emocionada que él, jijij) es que eso le da oportunidad de meterse en líos, jeejej y a nosotros de divertirnos con sus diabluras!!! =P
    Me gustó mucho la actualización, como siempre, te quedó de maravilla!! Y me quedo a la espera de la continuación, siiiiiiiii?!!!! jejeje
    Y a los demás nenes también los espero, jajaj

    Un besote!!!

    Camila

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