miércoles, 25 de septiembre de 2013

El entrenamiento no resulto eficiente



    CAPÍTULO  11
El entrenamiento no resulto eficiente

__ Es inútil sr. Ichiro, el niño no aparece por ningún lado__ dijo Genma.
__ Creo que lo mejor será que descansemos y lo busquemos mañana__ intervino Tendo.
__ Váyanse a sus casas si  gustan, pero yo continuare junto con mi hijo hasta que lo encuentre__ anunció el abuelo.
__ Está bien, seguiremos un rato más, pero nos separaremos por grupos yo iré con Hibiki y usted con Saotome. ¿Le parece?__ preguntó el padre de Akane.
Mientras, esto ocurría Ryoga había salido a robar, pero esta vez,  un banco del  barrio. En un principio el niño tenía cargo de conciencia por lo que iba a hacer, pero sabía que no tenía  más alternativas, si no hacia lo que Happosai le decía iba a morir de hambre, pues a este solo le importaba que el niño concediera sus fechorías. Ryoga había pasado a tomar el  lugar del  viejo, y  este  por  supuesto   reposaba  en la  comodidad  de  su  hogar   viendo  videos de mujeres encueradas entre otras cosas.
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__ ¡No sé  por qué siempre me he de meter en problemas por culpa de otros! __ se dijo el jovencito Saotome mientras se metía al baño a darse una ducha. Su madre mientras tanto miraba  muy  concentrada  las noticias.
__Muy buenas noches a todos, nos encontramos en la calle cinco del barrio de Nerima de  la ciudad de Tokio y hemos presenciado un robo a uno  de  los bancos más importantes del país, el delincuente de once años de edad Ryoga Hibiki  ha sido arrestado, al parecer quiso engañar a las autoridades disfrazándose con un extraño atuendo con peluca y tomando un nombre falso para…__ la reportera relataba los acontecimientos.
__ Mamá donde está mí…__ Ranma había llegado a la sala de su casa y se quedó sin habla al escuchar las no tan agradables noticias de su amigo__ Pero ¡¿Qué significa esto?!__ exclamó el chico abriendo los ojos como plato.
__ Parece que Ryoga está en serios problemas con  la  justicia__ dijo la madre.
__ Sí, eso parece, pero todo esto debe tener una explicación.
__ ¿Qué quieres decir Ranma?
__ Quiero decir que,  por muy terco que sea ese niño, no  creo que  se  haya  metido  a  ese  banco por voluntad propia.
__ ¡Como que no! Si en las noticias se muestra claramente, que él es el culpable del robo.
__ Si  mamá, pero lo que yo quiero decir,  es  que  no  ha  robado  por  gusto. Mira conozco perfectamente  a  Ryoga  y  en  su   mente   no  cabe  hacer  tal  cosa, seguro  lo han obligado o tal vez…__ Ranma  explicaba  a  su  madre con  la  toalla  puesta  en  la cintura y  ambos brazos cruzados.
__ Bueno, en eso tienes razón es un chico muy noble, pero  hay  un dicho que dice, que las apariencias engañan.__ respondió  la sra Saotome apagando la tele.__ Hijo será mejor que te pongas el pijama para dormir. Tu padre no demora y ya sabes que no le gusta que estés despierto a las tantas de la noche. __ añadió mientras se metía en la cocina.
Ranma Saotome se fue a su cuarto sin decir nada, agarro unos almohadones, los cubrió con una sábana de modo que se hiciera un bulto  para así, conseguir engañar a sus progenitores, luego se vistió rápidamente: se puso sus pantalones y camisa con cuello chino que usa la mayor parte del tiempo, cogió una pomada que sacó de una gaveta y salto por la ventana hacía la estación policial donde tenían a Ryoga.
Más temprano que tarde llego Ranma a las oficinas, donde tenían a su rival, no lo dejaban pasar, pero aun así negoció con los oficiales que estaban de turno  o  mejor dicho los soborno prometiéndoles una muy buena suma de dinero que por supuesto Genma tendría que pagar. De aquella manera, entró  y encontró al  pequeño Ryoga,  sentado en   una  silla con la  cabeza  baja,  siendo regañado por el encargado en cuestión. El muchacho lucia bastante cansado, hambriento y sucio;  daba pena verlo. Ranma lo abrazó mientras  le  daba ánimos, en aquel momento el  jovencito Hibiki olvidó  todo  el   odio  que  sembró Happosai en su cabeza; agradeciéndole a su amigo.
__ Oficial por favor suelte a mi amigo, el  pobre  no  sabe  lo  que  hace,  perdió  la  razón créame y si no me cree, llamamos  a  su familia.  Mire el otro día  se   metió  en  mi  casa  a  las  tres de la madrugada y  fue cuando… __ Ranma estaba relatando una  falsa  historia para  salvar  a  Ryoga  de  ir  a  prisión,  pero  el  tipo  se  mantenía  escéptico.
__ Tus argumentos no me…__ no pudo terminar  la  frase  porque vio  a  dos  adultos entrar.
__ Papá, tío Ichiro ¿Qué hacen ustedes aquí?__ preguntó Ranma.
__ Venimos por Ryoga __ contestaron al unísono.
__ Ah, yo también. Y no se preocupen ya tengo todo casi resuelto__ anunció el chico.
__ ¡Ranma Saotome! ¡Qué  diablos  haces  fuera  de  casa  a  estas  horas,  cuando se supone que  deberías  estar  en  tu  habitación  cumpliendo  con   tu   castigo,  como te  indique  niño!
__ Ranma trago saliva__ Bueno yo… es que estaba preocupado por  Ryoga y  por eso yo... ¡Papá no te enojes, además mamá ya me castigo!
__ Tu y yo hablamos luego. Ahora toca resolver este asunto__ respondió Genma.
El sr. Saotome  e  Ichiro conversaron con  el  oficial  durante  un  par  de  horas, pidieron  que le diera una oportunidad al chico; explicándoles que el muchacho estaba arrepentido por su comportamiento y que no lo volvería a repetir, el  niño  igual  se  disculpó  y  se  ofreció para  trabajar  el  resto  de  las  vacaciones  en compensación por  lo que había hecho, sin embargo Ryoga no había podido sacar ni un solo yen de aquel banco pues cuando quebró el vidrió para entrar sonó la alarma que despertó a una buena cantidad de gente  y   lo   único  que  se  oyó  en  aquellos  instantes  fueron   los   patrulleros  alrededor  de él. Al final, el oficial a cargo los dejo ir con el chiquillo. Ichiro, estaba bastante disgustado por el comportamiento de su nieto, pero en aquel momento se aguantó las ganas de  regañarlo severamente o incluso darle  una  buena  paliza  en  frente  de   los   presentes.
__ Gracias por todo sr. Saotome, dígale al señor Tendo y a mi hijo que ya encontramos a Ryoga __ dijo el abuelo mientras tomaba a su nieto del  brazo.
__ Bueno que  le  parece si nos vamos todos juntos ¡Llamemos un taxi!__ propuso Genma.
__ Me  parece  muy  bien,  necesito  llegar  a  casa y  conversar   largo   y   tendido  con este  mocoso__ habló nuevamente el abuelo.
Iban saliendo de las oficinas cuando uno de los oficiales se acerca al padre de Ranma para pedirle dinero.
__ Pero señor la idea fue de su hijo…__ y tuvo que pasar media hora Genma discutiendo con los oficiales; diciéndoles que todo se trataba de una simple broma, entretanto Ranma se escondía detrás de las piernas del sr. Ichiro. El sr. Saotome solo regaño a su hijo mientras caminaban en dirección a una estación de taxis.
Estando allá el abuelo quiso conversar un poco con Ryoga, sin embargo el  niño no estaba con el mejor estado anímico.
__ Ryoga tenemos que…
__ Si, si, ya se lo que vas a decir, pero te advierto una cosa…
__ ¡Ryoga guarda silencio y escucha lo que te voy a decir! 
__ ¡No, no es el momento, ni el lugar para discutir sobre asuntos familiares!__ replicó el muchacho. Genma y Ranma  abrieron mucho los ojos al escuchar  al  crio  hablarle  de aquella forma a Ichiro, sí  bien era cierto  para  ser  su  abuelo  era  relativamente  joven, por ello Ryoga no se tomaba muy enserio sus cantaletas.
__ Mira niñito. Vas a cerrar esa boquita  y  a  escuchar   lo   que   te   tengo  que  decir ahorita o de lo contrario voy  hacer algo que seguramente no será de tu agrado así que, obedece  y  se  calla ¿le quedo claro?
Ryoga no contesto, lo único que hizo fue cruzarse de brazos y  miró seriamente  a  Ichiro.
__ Ryoga no tienes ninguna razón para comportarte de esa manera, ¡Desconsiderado! Somos nosotros los que deberíamos estar molestos contigo. No sabes cuánto tiempo nos ha costado encontrarte  si  no  hubiera  sido  por  Ranma  tal vez…
__ Si, ya sé que Ranma me ayudo y se lo agradezco, pero aún tengo que arreglar cuentas con él, que  no  serán  ahora. Con  permiso, me voy a mi nueva casa __ añadió preparándose  para  marcharse.
__ ¿Nueva casa? ¿Qué  diablos  quieres  decir  con  eso  eh? ¡No quieras tomarme el  pelo muchachito! ¡Tú de aquí  no  te   mueves  y   menos  después de  todo  lo  que  has  hecho!
__ Siempre tan rencoroso Ryoga, cuando  soy   yo,  quien  debería  estar  molesto  porque tú  eres  el  que  siempre  me  está  buscando__ se defendió Ranma.
__ ¡Ya cállate Saotome! Pienso que  todo  ese  cuento  de  ir  a  la  delegación  para supuestamente  ayudarme   fue   solo   por   hipocresía,  pero  te  advierto  que   haré  que  te tragues tus palabras y  tu  abuelo, entiende mi decisión. ¡No quiero volver a casa con ustedes!
__ Ryoga vas a venir con nosotros quieras o no, y  ya  basta  de  rabiar  por  nada__ le regaño Ichiro.
__ ¿Cómo así que harás que me trague mis palabras? ¿Estás  loco acaso?__ interrogó Ranma.
__ No  te  hagas Saotome. Ya lo sé todo.
__ Ryoga no sé a qué te refieres. Enserio ¿estás bien?
__ ¡Arrg, ya cierra la boca!__ grito.
__ Ryoga te paso algo con Ranma, si es así solo dime que te hizo y vas a ver como lo pongo en su sitio__ intervino Genma.
__ ¡Papá! Que no le hice nada, este niño siempre inventando tonterías__ replicó.
__ No creo que le haya hecho nada a lo mejor mi nieto está confundido. Sr Saotome  porque  no  va   a   pedir  un  taxi, ya  es  tardísimo.  Y  tu  Ryoga  vas  a  dejar  esta   tonta discusión en este preciso instante__ dijo Ichiro
__ ¡No es ninguna tonta discusión, es un asunto serio entre Ranma y yo! ¡No te metas en esto Ichiro! __ grito el chico lo más fuerte que pudo.
__ Ryoga como puedes ser tan torpe;  como se te ocurre llamar a tu abuelo por su  nombre, pobre de ti.__ pensó Ranma  mientras se pasaba la mano por la cara.
Ichiro Hibiki se cansó de la altanería de su nieto;  se acercó,   lo  alzo por  la cintura  y   lo coloco bajo  su  brazo  e  inmediatamente  comenzó a  darle  una  buena dosis  de  fuertes palmadas sobre los pantalones.
__ A MÍ,    PLAF, PLAF, PLAF,    NO  ME  HABLAS,    PLAF, PLAF, PLAF,   EN   ESE  TONO,    PLAF, PLAF, PLAF,  MOCOSO INSOLENTE,    PLAF, PLAF, PLAF,  Y BASTA  YA  DE   BERRINCHES    PLAF, PLAF, PLAF,   TE GUSTE  O  NO,   PLAF, PLAF, PLAF,   HARAS  LO  QUE   TE   DIGO   Y  PUNTO,   PLAF, PLAF, PLAF, PLAF, PLAF… (Ryoga solo apretó sus labios con fuerza para evitar quejarse, mientras agitaba sus piernas intentando zafarse)
__PLAF, PLAF, PLAF, PLAF, PLAF, PLAF… (Le dio alrededor de  seis  nalgadas  más  y lo puso en el suelo)
Ryoga se llevó involuntariamente ambas manos a su trasero para sobarse, pero dejo de hacerlo, al recordar la presencia de Ranma, quien había contemplado  la escena.
__ ¡Ichiro vas a  pagar  muy  caro  el  haberme  humillado así!__ se dijo el niño internamente.
__ Escúchame muy bien lo que te diré jovencito: Aquí quien decide  soy  yo  y  no  va  a venir un mocosito como tú  a  faltarme  el  respeto. Espero que esto te haya servido de lección, para que pienses muy bien antes de hablar. Y  no  vuelvas  a  llamarme  por  mi  nombre  porque si  lo  intentas siquiera,  juró  que  te  bajo   los pantalones  y  te  doy   la zurra completa aquí mismo, así que no me estés provocando, que ya estas metido en muchos problemas como para buscar más__ el abuelo lo reprendía fuertemente.
__ Lo siento__ fue la única respuesta del chico, quien se encontraba con  los  ojos vidriosos, que mostraban claramente que tenía muchos deseos de llorar, pero no lo haría. No le daría el gusto a su abuelo, ni a Ranma, su mayor rival en todo. Ya había tenido suficiente con todo  lo  que  le  había pasado con Happosai, las  autoridades  policiales y  ahora su abuelo se atrevía  a  nalguearlo en  frente  de   Saotome. Eso era  lo que más  molesto  le  tenía, pero tuvo que tragarse su enojo para no ganarse  una  segunda  dosis  de  azotes  en público.
__ Bien. Nos vamos. __ dijo abordando el taxi, junto con su nieto y la familia Saotome
__ Ryoga no sé qué pude haberte hecho, he  tenido  muchos problemas y no quiero uno más. Así que tal  si mejor olvidamos nuestras diferencias y volvemos a ser amigos__ Ranma hablaba con Ryoga  en  el  asiento trasero del  taxi, pero el chico Hibiki no le contestaba__ ¿Y ahora a ti, que te pasa? ¿Por qué no hablas?__ el niño Saotome empezó a sacudir a su amigo buscando alguna respuesta.
__ ¡Ranma déjalo en paz!__ le riñó Genma.
__ Ranma lamento mi comportamiento de hace un rato, yo  también  he tenido algunos problemas, pero ni tu padre, ni tu tienen la culpa. ¡Olvida lo que te dije, luego vemos eso! Ahora solo quiero llegar a casa  y  dormir. Estoy  muy  cansado  y  muero  de  hambre__ habló finalmente el niño.
Finalmente el taxi llego a casa de los padres del chico distraído. Ichiro se bajó junto con su nieto.
__ Ryoga espera…
__ ¿Y a hora que quieres Ranma?
__ Toma y suerte__  le  lanzo una especie de  ungüento  a  su amigo.
__ ¿Pomada para el dolor? ¿Y esto?__ pregunto el  chico de  la  bandana amarilla.
__ Ah, es un regalo de mi parte, seguro que  lo  vas  a  necesitar. Adiós __ se despidió.
__ Hasta   pronto,  cuídense __ dijo Ichiro.
__ Igualmente__ respondió  Genma mientras el  taxi  se  alejaba  del  dojo Hibiki.
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9 comentarios:

  1. Genial, Ranma y Ryoga son los mejores amigos, se pueden matar entre ellos, pero cuando se trata de ayudarse el uno al otro, no importan las diferencias, es la verdadera amistad, me encanta la personalidad de Ryoga tan rebelde, y como se le planta al abuelo hay que tener pelotas con once años, no me atrevía a decir ni pío jeje.

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    1. Así, mismo es, esos dos tienen una amistad admirable, aunque aveces no lo quieran reconocer. Yo también soy del team Ryoga! Gracias por leer. Nicole.

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    2. Así, mismo es, esos dos tienen una amistad admirable, aunque aveces no lo quieran reconocer. Yo también soy del team Ryoga! Gracias por leer. Nicole.

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    3. Así, mismo es, esos dos tienen una amistad admirable, aunque aveces no lo quieran reconocer. Yo también soy del team Ryoga! Gracias por leer. Nicole.

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  2. Hola Nicole!!!
    Me encantó el capi. Estuvo genial!! Ranma sí que es un buen amigo... Ryoga también, sólo que es un chico confundido y lleno de rencor por tanto veneno de Happosai!! jeje Oye, pero a veces se pasa ese niño, tan insolente e irascible que es!! =P
    Espero que Ryoga no necesite usar la crema pero después de tantas que se mandó, creo que fue un gran gesto de Ranma!!!
    Te quedó re linda la actualización, en serio!!!.... ;-) Y no te olvides de Happosai, ese viejito merece un escarmiento, jejee!!!

    Besos!!
    Camila

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    1. Me alegro que te haya gustado. Si él es tan cambiante, pero bueno ya irá aprendiendo a mejorar el temperamento. Ya veré a donde mando a Happosai. Gracias por leer :-) Nicole

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    2. Me alegro que te haya gustado. Si él es tan cambiante, pero bueno ya irá aprendiendo a mejorar el temperamento. Ya veré a donde mando a Happosai. Gracias por leer :-) Nicole

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  3. Esta claro que los chavales son grandes amigos, y rivales. Espero que solucionen sus diferencias.
    Por otro lado, has captado muy bien la personalidad de ambos chicos y del resto de los personajes. Haces que me imagine la escena, eres una excelente escritora; tomando en cuenta que no siempre es fácil mantener la esencia de los personajes; creo yo que es mucho más complicado cuando se trata de series de anime, ya que aveces algunas personalidades son difíciles de definir.
    Giovanni

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  4. que bueno que por fin le encontraron a Ryoga y caray que hay que ver que por mucho que peleen son buenos amigos mira que se arriesgo Ranma a que lo vuelvan a castigar por ir al rescate se su amigo jeje ...vaya regalito tan peculiar y lamentablemente para Ryoga muy util jeje. Andrea

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