Edward
Carlisle no podía creer que su hijo mayor, al
menos en lo en lo que decía relación con el tiempo que llevaban en la familia
estuviera haciendo tamaña pataleta, todo porque no lo dejo salir con Bella
porque sabía que la chica estaba castigada, Edward, comenzó un berrinche digno
de un mocoso de tres años, no se salvo nada ni su preciado piano, ni el piso de
los pisotones, los quiero quiero quiero sonaba por toda la casa, así que
decidió actuar y ahí en medio de la sala tomo a su hijo lo arrastro hasta el
asiento del piano, desvistió as u hijo de la cintura para abajo le dio 112
nalgadas una por cada año desde su nacimiento el crio lloraba como el mocoso
mimado que era, las nalgadas habían sido realmente fuertes peor Edward se lo
merecía tenia que a prender a controlar sus berrinches, al cabo de las nalgadas
lo dejo mirando a la pared, por los mismo 112 minutos, una tortura sabiendo que
estaban todos en casa y que tenían que pasar por la sala para poder salir, pero
Carlisle no le perdono ni un solo segundo, finalmente fue perdonado, luego de
un beso y un abrazo tuvo que ordenar todo el desastre, lo peor de todo fue que
se quedo sin piano por un largo, largo tiempo.
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