domingo, 5 de abril de 2015

La biología no hace un padre, las manos con que educas si… Capítulo 3


La biología no hace un padre, las manos con que educas si…
Capítulo 3
Mario decidió llamar a Beatriz para encargar comida… una vergüenza que su padre viniera a Italia y no probara la Pizza, sin olvidar que debían matar a sus hijos… Bea amor… me traes pizza para comer… porfaaaaaaaaaaaa… luego se mordió el labio, y a ese par de hijos nuestros traerlos a casa de una oreja…
Bea: ¿Qué hicieron esta vez?
Mario: No han ido en toda la semana a clases porque están en la semana de vacunación… puedes creerlo toda la semana, ve tu a saber donde se metieron.
Bea: ¿Cómo que no fueron a clases?… yo los mato. Dijo echando una mirada a ese par, quienes de lejos por instinto de culpa, se encogieron en sus sillas.
Mario: A ellos no a sus traseros… no pudo evitar ponerse rojo al decir eso.
Bea: Iremos por los inyectables, que Sara los inyecte junto contigo.
Mario: No me lo recuerdes… pudiste haberme defendido… me vendiste al mejor postor… le dijo divertido… te amo… y lamento mucho lo que te hice pasar estos días… te prometo que no volverá a pasar.
Bea: Te amo y por el bien de tu trasero sé que no volverá a pasar. Dijo cortando la llamada y se dirigió a la mesa. Samantha cariño pide unas pizzas para tu papá y el abuelo, ustedes dos terminen de comer y se van a auto… y ni una palabra porque los zurro aquí mismo. Dijo en un tono para nada discreto… los chicos tragaron grueso.
Leo: O.O los pimos se potaron mal... y les harán pao pao en casa. Con la muestra del azote por si había alguna duda.
Sara: Bea ¿hija que ocurre?
Bea: Qué este par de diablitos ha faltado toda la semana a clases, por no ponerse la inyección que les toca, pero ni crean que se saldrán con la suya porque esta misma noche se inyectan, pero llegando a casa van por el cepillo y me esperan en sus habitaciones y escúchenme bien, porque por cada día que faltaron les daré 20 cepillazos antes de irse al colegio, al volver a casa y al acostarse a ver si vuelven hacer una gracia como esa.
Fernando: ¡Queee! mami… el cepillo noooo…
Jesús: 20 por cada día... y tres veces…. pero….pero…. eso serían como 300 cepillazos diarios…murmuró… mientras tragaba grueso.
Fernando: Abueee…. convence a mamá….no lo volveremos a hacer…ish ish...
Jesús: Lo...hicimos por miedo… no por otra cosa...mami…
Bea: Terminen de comer… además se dan el lujo de faltar a clases cuando no saben ni sumar… Jesús 20+20+20 son 60 pero si quieres 300 cepillazos diarios por mí está bien.
Jesús: Pero el error es tuyo de sintaxis... dijiste… si son 20 por cada día que faltamos… PLACK... Auuuu Nandoooo… perooooo.
Fernando: ¡Callate Idiotaaa…!
Bea tuvo que morderse las mejillas para no reírse… luego sacó la cuenta... ¿CÓMO QUE FALTARON 15 DIAS?… no te preocupes Jesús por 15 días te estaré dando 60 cepillazos.
Jesús: nooooo mami… solo faltamos 5…... solo 5… ahhhh… pregunta en el coleeee...
Bea no pudo evitar sonreír ante la insistencia de su hijo… Pues decídete Jesús… mejor terminen de comer.
Fernando/Jesús: Se...me quito… el hambre… Dijeron en coro, mirando el piso.
Bea: ¡Al carro entonces...!
Samantha vio de lejos, como los mellizos, salían del restaurant casi arrastrando los pies… con la cabeza baja…
 Y ahora… qué harían  mis hermanitos… se preguntaba Samantha.
Leo, se bajó de las piernas de la abuela, para correr a donde su prima, estaba prendado de ella…
Leo: ¡Samy…! Tía Bea… pao pao a Nando... y Chucho.
Samanta: ¿Y escuchaste por...qué? le pregunto mientras lo cargaba.
Leo: Shhhh….No fueron al cole… malo… malo… malo… pao pao con epillo... tía dice...
Samantha: Ohh sip… les van a dar pao pao… a los primos.
Finalmente todos en el auto no se dijo una sola palabra… Leo se sentó adelante con Sara y Samantha entre sus dos hermanitos para poder acariciar sus caritas mientras lloraban a mares por la sentencia dada por su inhumana madre… 
Al llegar a casa
Bea: Jesús ve por el cepillo Fernando a la habitación de tu hermano… hacía años que habían renunciado a castigarlos por separado porque eso los estresaba mucho más… misteriosamente tener cerca a su otra mitad los calmaba y al ver que sus hijos no se movían los envió con una fuerte nalgada, si están esperando una invitación puedo ir a buscar un cinturón… a lo que los chicos solo atinaron a correr.
Sara: Bea...hija… se que se merecen el castigo… pero no seas tan dura con mis nietos…
Bea: Cómo crees sí, con Mario tengo las manos llenas… un poco de susto no les hará mal.
EN EL CUARTO DE JESUS

Jesús: Buaaaaa Buaaaaa…. por tu culpa… todo fue tu idea… Nando...
Fernando: Buaaaaaa no es cierto… tu no querías que te pincharan tanto como yo… Buaa quiero a mi papi.
Bea entró a la recamara y se le partió el corazón ver a sus niñitos llorar así si parecían de 6 en vez de 16.
Bea: ¿Quien primero?, pero ninguno de sus dos niñitos se ofreció de voluntario… Jesús tú primero, dijo tomando a su hijo y desnudando el trasero antes de recostarlo sobre sus rodillas
Jesús: Nooooo mamiiiii por favooooor…. nooooo… El chico pataleaba de lo lindo…. se cubría el trasero… con la mano… y gritaba histérico... ¡PAPAAAAAAAAAAAA…. salvameeeeeeee….! Los gritos eran tan fuertes que despertaron a Mario quien quería ir al rescate de sus niños pero Samuel se lo impidió.
Bea: Basta… CRACK AAAAAAAAAYYYY  CRACK…AAUAUAUA NOOOOOO dejó caer los 20 cepillazos seguidos y muy muy fuerte en el trasero de su hijo menor, luego lo dejó parado mirando la pared con su potito al aire y repitió la misma acción con Fernando… en cuanto lo tuvo con el poto al aire no le dio tiempo ni de cubrirse con la mano… tomó el cepillo y castigo a su hijo en la misma cantidad que a su mellizo, ella lo único que quería era terminar con el castigo de una vez para poder mimar a sus  retoños.
Fernando: BUAAAAAAAAAA…. muy durooooo maaaaaaa…... me dueleeee…. PAPAAAAAAAAAAAAAA……...
Apenas se pusieron los calzoncillos… Bea, trato de mimar a Jesús, pero este no se dejó… salió corriendo al cuarto de su padre…. necesitaba su consuelo… y su padre también los necesitaba… así que sin importar las prohibiciones de Samuel se paró de la cama y salió corriendo descalzo y todo para consolar a sus bebés.
Mario: Ya Chucho….shhhh…. Nando… ya … ya pasó… no lloren así… le decía tenía a un chico en cada brazo… ambos pegaron sus caras en el pecho… y Mario les acariciaba… la espalda…
Fernando: Pa     Jesús: pi terminaban las palabras del otro… La mami nos pegó muy fuerte… es muchoooo nos quiere matar… quiere darnos 300 cepillazos al día… pito dile que no pipito no quierooooo buaaaaaaa le decían a coro e interrumpiéndose.
Mario: Shhhh… yaaaa….cálmense... ¿300? vamos chicos no sean exagerados... Beatriiiiiiz… llamó a su mujer… porque los chicos estaban demasiados alterados…
Bea: Mario Enrique que haces fuera de la cama…
Mario: Salí a consolar a mis príncipes…
Beatriz miró a sus hijos…y luego de un suspiro, les dijo: a ustedes dos les conmutó la pena si se encargan de cuidar al papá… no puede salir de la cama… todo lo que él quiera y necesite ustedes se lo buscan, el papi necesita muchos mimitos… además… con la promesa de no jubilarse más del colegio, ¿qué dicen tenemos un trato?. Dijo ofreciéndoles la mano. Nando… corrió a estrechar la mano… pero Chucho… arrugó el ceño… enojado con su madre… por el castigo recibido…
Nando: Mami… trato hecho… te lo prometo... le dijo abrazándola fuertemente... y de ella le besó la frente. Papi… vamos a la cama…
Mario: Si, Nando... pero primero… Chucho… anda... ve... hijo...
Jesús: NOooo... la mamá me pegó muy duro... Dijo cruzando los brazos… y dándole la espalda.
Mario: Jesuuuuuus… anda…
Jesús: NOOOOO… ZAS… Auuuu papiiiii…
Bea: Mario… dijo abrazando a su pequeñito… yo ya lo castigue… anda bebe… sana sana colita de rana… le hacía a la colita de su hijo mientras le sobaba para que se pasara un poquito el dolor
Jesús: ¡No se pasa….nadaaaa!...eso nunca funciona...grrrr. Dijo colocando un puchero...malaaaa...
Bea: qué mala es mamá… que le pegó al bebé por nada… sí él solo se porta bien ¿verdad?… se habrá equivocado y era otro niñito, él que no fue a clases...
Jesús: sippp uno igualito a mí… qué se llama Nando…. Dijo fingiendo indignación.
Fernando: ¡Oye!… que a ese Nandito si le pegaron y bien fuerte…
Bea: será que la mamá se equivocó y le dio todo el castigo a uno solo…
Mario: A lo mejor amor… cómo, cuando le dábamos el tetero al mismo bebé… ¿te acuerdas?… sí... eso es así… te falta castigar a Jesús… 20 cepillazos... ¿No? ó 40 porque si todos los recibió Nando... no sería justo para él no crees? dijo divertido viendo la cara de susto a su hijo.
Bea: yo creo que 40 es lo justo ¿no? Nandito...
Fernando: Si mami 40… por ahora y 40 más por dejarme sin tetero…
Jesús: QUEEEE…. noooo… pero sí... el que se tomaba el tetero doble ...eras tuuuuu…
Fernando: quien sabe… yo dijo que eras tu...
Mario: JAJAJAJA cof cof cof
Bea: no veo que están cuidando al papá. Dijo levantando una ceja.
Jesús: Papi… mejor vamos al cuarto… estas descalzo...
Fernando: Si... debes arroparte… antes que mami… decida… buscar de nuevo el cepillo… corre… Chucho….
Samuel: O... peor… No vaya a ser que… el abuelo vaya a buscar la correa. Dijo Samuel de la puerta del cuarto de su hijo.
Fernando/Jesús: ¿La correa? Dijeron con terror… Papi… nunca nos ha pegado con la correa… dijeron a coro.
Samuel: Bueno… siempre hay una primera vez… ¿ quieren probarla...?
Fernando/Jesús: NOOOO Abuee...
Samuel: ¡A la cama hijo!. Le ordenó muy feo…
Mario bajó la cabeza y partió a meterse a la cama… con un hijo a cada lado y tratando de no hacer muecas de dolor…. una vez en ella.
Mario: Mejor hacerle caso al papá…
Fernando/Jesús: siiii… lo sentimos… papi…
Mario: No me refería a mí… sino al abuelo. Le dijo picándole el ojo y dándole un beso en la frente a cada chico.
Bea les llevó pizza antes que se durmieran… sabía que sus angelitos no habían comido ni la mitad de lo que necesitaban para estar satisfechos… y ni Mario ni Samuel habían comido… pero junto a la pizza les llevó a Leo para que tuvieran una tarde de chicos… y el chiquito que era muy observador, cuando tomó un pedacito de pizza y antes de llevárselo a la boca dijo… Pimos pao pao tía Bea… tío Mario pao pao abuelito jijiji para dar un gran mordisco a la pizza. Los Chicos abrieron los ojos muy grandes… y miraron a su padre… preguntando con la mirada… sí eso, que el enano había dicho era verdad o no.
Mario se hizo el loco… se moría de vergüenza… ese pequeño granuja era digno hijo de su padre.
Mario: Pero… No ¿Qué NO ERAS Terry? ¿humm? Le dijo haciéndole cosquillitas….
Leo: jjijijij No... Terry,…. Sono... Leo…... Leo Endique…

Todos: jajajaja...

1 comentario:

  1. Mori de ternura como los chicos llaman a su papá y Leo soltó que a Mario también le pegaron jaja.

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